Enseñar el cambio climático: Un desafío para el tiempo presente

De Puerto Natales a Santiago hay 3 mil kilómetros, distancia que en bus supera las 40 horas y que en avión se acorta a cuatro. Este es parte del viaje que realizaron los escolares para participar nuevamente del encuentro enmarcado dentro del Pacto Global de Jóvenes por el Clima (GYCP) que se llevó a cabo el miércoles 27 de abril. A ellos, se sumaron, también, estudiantes de Chiloé y Chincolco, llegando a un total de 41 jóvenes.

El objetivo es claro: conversar y debatir respecto al presente y el futuro del planeta junto a investigadores, investigadoras, académicos y activistas. De eso se trató el encuentro titulado “Enseñar el cambio climático: Un desafío para el tiempo presente” , organizado por la Facultad de Educación de la Universidad Católica, y con el apoyo del Ministerio de Educación y la Escuela de Estudios Superiores en Ciencias Sociales de París. El proyecto GYCP, a cargo del académico de la Facultad de Educación UC, Luis Flores, ha trabajado desde 2015 con establecimientos escolares desde Putre hasta Puerto Williams y Rapa Nui, y esta es la primera vez que se realiza el conversatorio en Santiago desde el inicio de la pandemia.

“El primer objetivo del proyecto y de este conversatorio es mostrar qué enseñar y aprender son parte del mismo circuito, no hay un objeto de conocimiento encerrado a un orden disciplinario ni aprendizajes determinados por una sola metodología (…) No aprendemos a cambiar el modo de pensar desde un curso o asignatura, aprendemos a pensar distinto cuando cambiamos el plano del conocimiento, su perspectiva, su diseño, su estructura y su lógica”, explicó Flores.

Una opinión que compartió el rector de la UC, Ignacio Sánchez, quien señaló que “la educación es la vía para entregar conocimientos y llegar a los jóvenes, que son quienes liderarán las acciones pendientes para la construcción de un mejor planeta. En manos de ustedes está el presente y futuro”.

Un cruce de realidades

En la instancia participaron estudiantes de distintos lugares del país, quienes compartieron proyectos ligados a problemáticas presentes en sus localidades.

En la región de Magallanes, por ejemplo, existen riquezas naturales como los estromatolitos, estructuras fósiles que conforman la evidencia más antigua de la vida microbiológica en la tierra, y que según los estudiantes Pablo Cárdenas, Génesis Ramírez y Nathaly Álvarez, de Puerto Natales, se encuentran amenazados por el calentamiento global. Región que justamente albergó los Talleres Verdes, realizados en enero , donde distintos estudiantes pudieron visitar estos espacios naturales y aprender sobre su fragilidad frente a la crisis climática.

Una de ellas fue Gabriela Prado, de la localidad de Chincolco, ubicada en la zona central de Chile, quien señaló que “cuando nos dijeron que en el sur estaban en sequía nos quedamos impresionados, porque allá llueve casi todas las semanas, pero en Chincolco llueve con suerte una vez al año”. En los talleres la estudiante pudo conversar con científicos, científicas y alumnos de distintas partes de Chile, y comprender que “sí están en sequía, pero que están haciendo las cosas a tiempo. Están declarando la catástrofe cuando deben hacerlo, así tienen más probabilidad de que puedan solucionarlo, porque nosotros en Chincoclo estamos muy mal, ya no tenemos agua en el río”.

“Cómo se mezclan estas emociones que están asociadas al cambio climático, la preocupación que tienen y el miedo que genera para el futuro es súper complejo de abordar desde la educación”, explicó la psicóloga comunitaria de la Universidad de Chile, Catalina Valenzuela, presente en uno de los paneles. “Debemos poder incorporar todas esas preocupaciones y buscar entre todos darle una solución, porque este problema lo podemos solucionar a través de este cambio de pensar, de re-aprender a relacionarnos entre nosotros y con la naturaleza”.

El presente y el futuro

Uno de los ejes centrales del encuentro fue dar relevancia al presente, respecto a problemáticas del futuro. En esa línea, estudiantes de Chiloé presentaron proyectos de corto plazo que involucran acciones como la cosecha de aguas lluvias, la capacitación sobre reciclaje y el reemplazo de fertilizantes sintéticos por otros de origen natural.

“Paralelo a esto vamos a hacer una campaña de concientización, que es algo central”, mencionó la estudiante Katherine Montiel. “Somos una generación que tiene acceso a mucha información. Crecimos en un contexto distinto, entonces nosotros tenemos mucho poder y ese poder es el habla, poder comunicarnos y expresar lo que sabemos. A muchos de nosotros no nos enseñaron estos temas nuestros padres, entonces nuestro punto fuerte es poder hablar con ellos, con nuestros abuelos”.

“Se está escribiendo una nueva Constitución, y es un tema donde se tiene que tocar el cambio climático, pero muchos de nosotros no vamos a votar porque somos menores de edad, entonces tenemos que hablar con las personas que hoy toman las decisiones y son el presente. Podemos dar opciones, podemos hablar para que haya un futuro, pero tenemos que también preocuparnos del presente”, agregó la escolar.

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