Académica de Educación UC participa en “Programa de la Amabilidad”, que promueve el desarrollo socioemocional de niños y niñas

El programa, donde participó la académica de Educación UC Susana Mendive, fue aplicado en la comuna de Antofagasta y tuvo su ceremonia de cierre la última semana de diciembre, donde se dieron a conocer los positivos resultados en torno a su implementación.

A raíz de la vuelta a la presencialidad en el periodo pospandemia, y frente a la serie de desafíos que eso implicó para el proceso de enseñanza y aprendizaje de niños y niñas y el sistema educativo en general, la Pontificia Universidad Católica de Chile en conjunto con la Universidad Católica del Norte, la Universidad de Antofagasta, la Junta Nacional de Jardines Infantiles (JUNJI), la Corporación Municipal de Desarrollo Social de Antofagasta y la minera Escondida – BHP, implementó el “Programa de la Amabilidad”, con el fin de abordar el desarrollo socioemocional de 1.300 niños y niñas de la comuna de Antofagasta.

El pasado 27 y 28 de diciembre este programa, donde participó Susana Mendive, Profesora asociada de la Facultad de Educación UC y directora del Departamento de Aprendizaje y Desarrollo, realizó su ceremonia de cierre, dando a conocer los positivos resultados de la implementación y los efectos que este tuvo en los niños y niñas, junto a las educadoras/es dentro y fuera de la unidad educativa.

“Gran parte de las percepciones que hemos recogido de las educadoras es que, luego de implementar las primeras lecciones, se mostraron ciertos cambios en las conductas de los niños, lo que incrementó la motivación y el involucramiento de los equipos pedagógicos en implementar el programa”, mencionó Susana Mendive.

De la Facultad de Educación también participó la académica Regina Lohndorf, asesorando la fase de preparación de la capacitación e implementación del programa. También Pamela Rodríguez, jefa del Programa de Pedagogía en Educación Parvularia, visitó una de las sesiones de capacitación que se realizaron en Antofagasta, para conocer la experiencia y evaluar las posibilidades de incorporar elementos de esta iniciativa en el rediseño de la carrera.

Este proyecto nace a raíz del “Programa Volvamos Juntos” que BHP formó en 2020, y que junto a las mismas universidades buscaba apoyar a las empresas en su reactivación tras la crisis económica por el Coronavirus y cuidar de la salud de las personas y equipos.

Este Programa de Amabilidad se implementó durante el segundo semestre de 2022 en jardines JUNJI, Escuelas de Párvulo y jardines VTF de la comuna de Antofagasta, e implicó dinámicas como la respiración consciente y la lectura de cuentos y canciones, abordando también conceptos como la amabilidad, el perdón, la gratitud y el cariño. La iniciativa incluyó una capacitación a 130 educadoras y asistentes de párvulos, donde uno de los desafíos principales fue contextualizar el programa desarrollado por el Centro para la Investigación de Mentes Saludables de la Universidad de Wisconsin, Madison, para ser adaptado a las aulas del norte de Chile.

Para el cierre del programa se entregaron además los resultados preliminares de una encuesta de evaluación contestada mayoritariamente por técnicos y educadores, quienes valoraron la facilidad de implementación del programa, la relevancia y necesidad que éste posee y las modificaciones que se podrían aplicar en instancias futuras. Las lecciones que mejor funcionaron con los niños y niñas fueron  “Cuerpos conscientes y la conciencia de la atención y la respiración”, “Cultivando semillas” y “Hacer botellas de la calma y practicar su uso”.

Este programa además, dice Susana Mendive, se enmarca en un periodo particular, pues “en este tiempo post-pandemia se ha hablado del incremento de niños con necesidades educativas especiales. Más niños que al parecer tienen distintos tipos de trastornos, rezagos en el desarrollo, incluso un incremento en niños que tienen algún trastorno del espectro autista, y algunos de los recursos que estaban presentes en el programa permitían que este tipo de necesidades se pudieran incorporar en algunas de las dinámicas grupales, lo cual fue bastante valorado por las educadoras”.

“Todas resultaron bien, fueron útiles y lúdicas. Los materiales (fueron) adecuados para la implementación del programa, nos permitió tener un momento al día de calma y de conocernos, tanto por fuera como por dentro, estableciendo relaciones más efectivas entre pares”, fue uno de los testimonios recopilados.

El programa, añade Mendive, posee proyecciones de cara al 2023 específicamente en dos ámbitos. El primero es apoyar la implementación del programa en el resto de los niveles educativos que ya participaron, y el segundo es extender su aplicación a otros jardines infantiles de la comuna.

“Está ese interés por el resto de los jardines de la comuna, pero también se ha visualizado en las nuevas conversaciones que hemos tenido el poder implementarlo incluso a nivel regional, que es el ámbito de acción que tiene la Dirección Regional de JUNJI. Eso quiere decir otras comunas de la región de Antofagasta”, concluye Susana Mendive.