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Nuevo volumen temático de Revista PEL: Las distintas nociones de ciudadanía en el campo educacional

agosto 29, 2023


En su segunda publicación del año, la revista indexada en Scopus aborda las distintas formas en que se entiende y manifiesta el concepto de ciudadanía, a partir de la mirada de investigadoras e investigadores de Argentina, México, Inglaterra, Bélgica y Chile.

Ocho artículos componen el total de “Ciudadanía y educación en tiempos de crisis democrática y global”, el nuevo número temático de la Revista de Investigación Educacional Latinoamericano (PEL), a cargo del académico de Educación UC Ernesto Treviño y la investigadora y estudiante del Doctorado en Educación UC Catalina Miranda, quienes participaron como editores invitados. 

Esta nueva entrega, explican sus editores, aborda la formación ciudadana y la relevancia que el contexto histórico y cultural tienen en esas expresiones de ciudadanía, y cómo el diálogo, por ejemplo, en entornos escolares, impacta en esa formación. 

Los ocho artículos abordan situaciones de países latinoamericanos, como en México, donde se examinan los factores que afectan el apoyo a la violencia, o Argentina, donde se ahonda en cómo la degradación ambiental impacta en la ciudadanía, y también el rol que tiene la equidad de género a nivel continental. 

Una ciudadanía poco explorada

Generalmente, explica Ernesto Treviño, las investigaciones sobre ciudadanía se centran en las democracias liberales, lo que representaría una proporción relativamente minoritaria de la población y los países del mundo. Por lo mismo, “nos hacemos hoy esa pregunta bien genuina: ¿Qué es ser ciudadano en lugares donde no hay democracia?”, explica. 

“Tenemos la idea de que países tan importantes como China y la India deberían estar participando en estudios internacionales y conocer formas de ciudadanía distintas a esta manera hegemónica en que lo vemos quienes adherimos a los principios de la democracia liberal. Y esto no por defender los sistemas no democráticos, sino con un afán bien investigativo. Quisiéramos ampliar el debate para poder entender esas formas de ciudadanía”, añade el investigador. 

Hay factores sociales y culturales, complementa Catalina Miranda, que configuran otro tipo de ciudadanía, y que marcan matices respecto a las expresiones ciudadanas propias de las democracias liberales occidentales. En éstas, explica Treviño, el ciudadano puede tener dos grandes dimensiones. Una de ellas es cumplir con sus deberes de ciudadano, obedecer las leyes, votar y participar en estructuras políticas, pero también, cuando haya situaciones injustas, tener la posibilidad de protestar en contra del sistema. 

“Es la combinación de ambas cosas la que se supone mantiene la vitalidad de las democracias liberales. Pero en los regímenes no democráticos parece ser que la adhesión a la norma es súper importante y es lo primero y lo único. La no adhesión o la protesta contra la norma puede tener efecto incluso en la libertad de las propias personas que participan, y esa es una distinción súper importante”, explica el académico. 

La escuela: una puerta de entrada al mundo

Un desafío pendiente que plantean los editores es el fomentar la participación ciudadana desde la escuela, y “empezar desde la educación inicial. Comenzar allí a ver los espacios de participación que tienen niños y niñas a través del juego o en actividades en interacción entre pares, donde empiecen a mostrar una autonomía y una exploración del mundo”, dice Catalina Miranda. 

De esa forma, apunta Miranda, los menores empiezan a configurarse a través de una comunidad local, lo cual se puede extrapolar en una forma global. “Que entiendan que ellos tienen un lugar, y que eso puedan verlo en otros espacios. Verse no en un abstracto de ciudadanos, sino que sentirse y percibirse como uno, más allá de la comunidad local”. 

Esos elementos guardan relación con una formación para la deliberación racional, el diálogo y la consecución de acuerdos, que es lo que trata de hacer la escuela, dicen los editores. Pero también aseguran que si un sistema político es disfuncional y no responde a las necesidades de los ciudadanos, “es muy difícil que la escuela solamente convenza a los niños y a la sociedad de que un sistema democrático es lo que necesitamos”. 

“La ciudadanía no se aprende únicamente enseñando contenidos, sino que es un conjunto de habilidades para relacionarse con los demás. Cuando tú ves que los líderes se despliegan de una manera que no es acorde con esas habilidades que se promueven en la escuela, es muy difícil que la escuela pueda sola, y allí es necesaria una complementación”, concluye Treviño. 

Revisa en este enlace la nueva entrega de Revista PEL